Sangrado Uterino Anormal y Postmenopáusico
El sangrado uterino anormal es un problema común para las mujeres de todas las edades y representa hasta un tercio de las visitas al consultorio ginecológico. Los dos tipos principales son el sangrado fuerte que ocurre en un momento apropiado o esperado, como un período menstrual fuerte (menorragia), y cualquier tipo de sangrado que ocurra inesperadamente (metrorragia).
El sangrado uterino anormal puede ser difícil de identificar, porque la pauta de la normalidad depende de la edad reproductiva de la mujer. El sangrado uterino en el período postmenopáusico es siempre anormal y necesita un estudio detallado de la condición ginecológica de la paciente.
¿Qué es el sangrado uterino anormal y postmenopáusico?
El sangrado uterino anormal y postmenopáusico se presenta como una hemorragia fuerte o inusual del útero descargada a través de la vagina. Puede ocurrir en las mujeres en edad fértil en cualquier momento de su ciclo menstrual.
También se presenta en algunas mujeres menopáusicas, en cualquier caso es un signo de alarma que las debe llevar a consultar a su médico lo antes posible, pues diversas patologías, algunas de gravedad, pueden estar detrás de esa hemorragia.
¿Cuáles son las causas del sangrado uterino anormal y postmenopáusico?
A la luz de las diversas investigaciones y hallazgos respecto al tema, es probable que el sangrado uterino anormal y postmenopáusico sea causado por muchos elementos que interactúan entre sí.
Si bien no se conocen con exactitud cuáles son las causas de esta patología se estima que las siguientes serían las más frecuentes:
- Vaginitis.
- Endometritis atrófica.
- Pólipos endometriales o cervicales.
- Miomatosis uterina.
- Hiperplasia endometrial.
- Carcinoma de endometrio.
- Los embarazos ectópicos, los abortos espontáneos, la placenta previa y otros embarazos problemáticos pueden causar hemorragias irregulares.
- Estrógenos exógenos.
- Otros (Traumatismo vaginal, carúncula uretral, sarcoma uterino, cáncer de cuello uterino, anticoagulantes).
- Los medicamentos hormonales pueden causar hemorragias postmenopáusicas como efecto secundario, pero aparte de eso, el sangrado en una mujer postmenopáusica es anormal y debe ser investigado de inmediato.
- Así mismo los anticonceptivos orales pueden causar varios patrones de sangrado irregular.
- Los DIU no medicados pueden aumentar el flujo menstrual; los DIU tratados con hormonas pueden reducir el flujo.
- Problemas de tiroides.
- Síndrome de ovario poliquístico, puede generar periodos abundantes debido a la acumulación anormal del revestimiento del útero.
Independientemente de la posible causa subyacente, es importante que una mujer vea a su médico cuando tenga un sangrado uterino anormal.
¿Cuáles son los síntomas del sangrado uterino anormal y postmenopáusico?
El síntoma distintivo del sangrado uterino anormal y postmenopáusico es la presencia de una hemorragia inusual en la paciente, en el caso de las mujeres en edad fértil los periodos menstruales son excesivamente largos y con abundante secreción, también puede presentarse sangrado entre periodos.
En relación con la mujer postmenopáusica, la hemorragia se presenta sin que exista un motivo fisiológico que la sustente, puesto que por efecto de la disminución hormonal lo natural es la ausencia de sangrado uterino.
¿Cómo se diagnostica el sangrado uterino anormal y postmenopáusico?
El médico comenzará un examen para detectar el sangrado anormal y postmenopáusico preguntando a la mujer sobre los síntomas que puede estar experimentando. Es probable que pregunte: fecha de inicio de los síntomas, cantidad aproximada que sangra, antecedentes familiares con esa patología.
Para realizar el diagnóstico del sangrado uterino anormal y postmenopáusico lleva a cabo un examen ginecológico estándar, durante el mismo, examina los órganos sexuales y realiza la palpación del abdomen y el tacto rectal.
Dependiendo de los síntomas de la mujer, el médico puede recomendar uno o más de esta serie de pruebas.
- Dilatación y legrado: Durante esta técnica se dilata el cuello uterino para obtener una muestra de tejido grande, implica el uso de una herramienta especial llamada histeroscopio para ver dentro del útero e identificar cualquier crecimiento potencial.
- Biopsia del endometrio: Este procedimiento consiste en introducir un tubo pequeño y delgado en la vagina para llegar al cuello uterino y tomar una muestra de tejido del revestimiento del útero. Este tejido es examinado para detectar la presencia de células anormales, como las células cancerosas.
- Histeroscopia: Durante este examen, el médico inserta una herramienta con una cámara delgada e iluminada en el extremo para examinar el interior del útero y su revestimiento, de esta manera puede identificar pólipos o crecimientos anormales.
- Ecohisterografía: Se inyecta líquido a través de la vagina y dentro del útero. El médico realiza entonces un ultrasonido transabdominal. El proceso puede permitir determinar si las paredes del útero son más gruesas o más delgadas de lo esperado.
- Ecografía transvaginal: Este procedimiento consiste en insertar una sonda especial de ultrasonido en la vagina para permitir al médico visualizar el útero desde la parte inferior de este, en lugar de hacerlo desde la parte inferior del abdomen.
¿Cuáles son los tratamientos disponibles?
El tratamiento de un sangrado uterino anormal y postmenopáusico suele depender de la causa subyacente asociada con la hemorragia. El médico puede considerar la información obtenida de las pruebas para determinar el mejor tratamiento.
Algunos ejemplos de tratamientos para causas subyacentes específicas son:
- Pólipos: El tratamiento de los pólipos puede incluir la extirpación quirúrgica de los pólipos para que no puedan seguir sangrando.
- Cáncer de endometrio: A menudo, el tratamiento del cáncer de endometrio consiste en extirpar el útero y los ganglios linfáticos cercanos a los que el cáncer podría haberse extendido.
Este procedimiento se conoce como histerectomía. Dependiendo de la propagación del cáncer, una mujer también puede necesitar someterse a tratamientos de quimioterapia y radiación. - Hiperplasia endometrial: Las mujeres que padecen esta afección pueden tomar medicamentos conocidos como progestinas, que ayudan a evitar que el revestimiento del endometrio se vuelva demasiado grueso.
Sin embargo, un médico puede recomendar que se realicen pruebas regulares para detectar células cancerosas en el interior del útero para asegurarse de que no se presenta cáncer de endometrio. - Si una mujer tiene hemorragia vaginal debido al adelgazamiento de los tejidos endometriales, un médico puede recetar estrógeno vaginal. Este medicamento puede reducir los efectos del adelgazamiento de los tejidos.
En general el sangrado uterino anormal y postmenopáusico es una afección que puede comprometer la salud y generar molestias de diversa gravedad en la mujer, si usted padece de sangrado uterino anormal y postmenopáusico, debería acercarse a su médico.
En caso de que usted desee agendar una consulta con el Dr. Juan Rivero Corona, Ginecólogo en México, no dude enviarnos un mensaje a través del formulario de contacto. El Doctor Rivero se especializa en el diagnóstico y tratamiento del sangrado uterino anormal y postmenopáusico.