Virus del Papiloma Humano
El virus del papiloma humano (VPH), incluye a cualquiera de los subgrupos de virus pertenecientes a la familia Papovaviridae que infectan a los seres humanos, causando verrugas (papilomas) y otros tumores benignos, así como cánceres del tracto genital, especialmente del cuello uterino en las mujeres.
Se trata de pequeños virus poligonales que contienen ADN de doble cadena circular; se han identificado más de 100 tipos distintos de VPH mediante análisis del ADN, alrededor de 45 tipos pueden causar infecciones en el área genital.
La infección del VPH es responsable de más de medio millones de casos de cáncer de cuello uterino cada año, más del 85% de los cuales ocurren en el mundo en desarrollo.
¿Qué es el Virus del Papiloma Humano?
La vía preferente de propagación del VPH es el contacto sexual. La infección por este virus puede ser grave, tanto que puede causar cáncer, dentro de los que están el de cuello uterino, vulva, vagina, pene y ano, además puede generar algunos cánceres de cabeza y cuello.
¿Cuáles son las causas del Virus del Papiloma Humano?
El virus que causa la infección del VPH se transmite por contacto de piel a piel. La mayoría de las personas contraen una infección genital por VPH a través del contacto sexual directo, incluyendo el sexo vaginal, anal y oral.
Debido a que el VPH es una infección de piel a piel, no es necesario tener relaciones sexuales para que se produzca la transmisión. Muchas personas tienen VPH y ni siquiera lo saben, lo que significa que pueden contraerlo aunque su pareja no tenga ningún síntoma. También es posible tener varios tipos de VPH.
En raras ocasiones, una madre que tiene VPH puede transmitir el virus a su bebé durante el parto. Cuando esto sucede, el niño puede desarrollar una condición, en la que desarrolla verrugas relacionadas con el VPH dentro de la garganta o las vías respiratorias.
¿Cuáles son los síntomas del Virus del Papiloma Humano?
A menudo, la infección por VPH no causa ningún síntoma o problema de salud perceptible, se ha demostrado que el 90% de las infecciones de VPH desaparecen por sí solas en un plazo de 2 años. Sin embargo, debido a que el virus sigue estando en el cuerpo durante este tiempo, la persona puede transmitir el virus sin saberlo.
Cuando el virus no desaparece por sí solo, puede causar graves problemas de salud. Entre ellos se incluyen las verrugas genitales y las verrugas en la garganta. El VPH también puede causar cáncer de cuello uterino y otros cánceres de los genitales, cabeza, cuello y garganta.
Los tipos de VPH que causan verrugas son diferentes de los tipos que causan cáncer. Por lo tanto, tener verrugas genitales causadas por el VPH no significa que se desarrolle cáncer.
Los cánceres causados por el VPH a menudo no muestran síntomas hasta que la enfermedad se encuentra en las últimas etapas. Las pruebas de detección regulares pueden ayudar a diagnosticar los problemas de salud relacionados con el VPH en una etapa más temprana. Esto puede mejorar el pronóstico y aumentar las posibilidades de supervivencia.
¿Cómo se diagnostica?
Lamentablemente se carece de pruebas de laboratorio capaces de revelar la existencia del virus del papiloma, además un reconocimiento médico, ginecológico o urológico, tampoco puede detectarlo, a menos que la persona tenga verrugas visibles en la piel genital o si se obtiene un resultado anormal en el frotis cervical.
En el caso de las mujeres, el diagnóstico del VPH a menudo comienza con resultados anormales de un examen rutinario de Papanicolau. Para realizar esta prueba (o «frotis»), el médico tomará una muestra de células del cuello uterino. La misma se envía a un laboratorio y se observa bajo el microscopio.
Si se encuentran células anormales, el médico puede realizar otra prueba de Papanicolau e incluir una de VPH cervical. Este análisis puede identificar muchos de los tipos de VPH que pueden causar cáncer de cuello uterino.
Si arroja la presencia de un tipo de VPH que puede causar cáncer, es posible que el médico desee realizar una colposcopía. En esta prueba, usará una lupa especial para ver más de cerca el cuello del útero. Si el tejido tiene un aspecto anormal, cortará un pequeño trozo para realizar una biopsia. Esta prueba buscará signos de cáncer.
¿Cuáles son los tratamientos disponibles?
La mayoría de los casos de VPH desaparecen por sí solos, así que no hay tratamiento para la infección en sí. El protocolo clínico indica la repetición de pruebas anuales para detectar si la infección de VPH persiste y si se ha desarrollado algún cambio celular que necesite un seguimiento adicional.
Las verrugas genitales pueden tratarse con medicamentos recetados, quemándose con una corriente eléctrica o congelándose con nitrógeno líquido. Pero deshacerse de las verrugas físicas no trata el virus en sí, y las verrugas pueden volver.
Las células precancerosas se pueden eliminar mediante un breve procedimiento que se realiza en el consultorio del médico. Los cánceres que se desarrollan a partir del VPH pueden tratarse con métodos como la quimioterapia, la radioterapia o la cirugía. A veces, se pueden utilizar varios métodos.
Los exámenes de rutina para detectar el VPH y el cáncer de cuello uterino son importantes para identificar, controlar y tratar los problemas de salud que pueden resultar de la infección por VPH.
De lo analizado hasta ahora podemos decir que la infección de VPH es una de las más frecuentes enfermedades de transmisión sexual, además hay ciertos tipos de virus del papiloma que pueden comprometer gravemente la salud del portador puesto que desembocan en cáncer. Por todo esto se hace imprescindible que frente a cualquier duda consultemos con nuestro médico de confianza.
En caso de que usted desee agendar una consulta con el Dr. Juan Rivero Corona, Ginecólogo Obstetra en CDMX, no dude enviarnos un mensaje a través del formulario de contacto. El Doctor Rivero se especializa en el diagnóstico y tratamiento del virus del papiloma humano.